la gran guerra

la II guerra mundial tuvo un beneficio inesperado para los gays en eua. no quiero analizar el conflicto bélico propiamente tal, sino sólo referirme a su relación con el surgimiento de grupos de hombres gays en dos grandes ciudades que dieron origen a una nueva subcultura que abrió caminos para todos en esta parte del mundo.

la guerra movilizó un montón de hombres jóvenes de sus pueblitos perdidos hacia las grandes ciudades como new york y san francisco. hablamos de alrededor de 16.353.700 hombres entre 18 y 25 años y si 3% era gay eso es como 400.000 viviendo en ciudades más chicas que santiago. allí se encontraron hombres jóvenes, solos, con pocas posibilidades de alojamiento, asustados, en una situación límite. allí se encontraron y se descubrieron. allí tuvieron los primeros romances y enamoramientos, esos que son los más fuertes de nuestras vidas. fueron a la guerra y algunos regresaron. (poco menos de 10% murió en la guerra)

al término de la guerra, la “desmovilización” pasó por las mismas ciudades. ahora eran hombres jóvenes, sobrevivientes, fuertes. habían estrechado lazos con sus amigos / amantes y no se regresaron a “littletown, usa” sino que se quedaron en esas ciudades a vivir sus nuevas vidas, ciudades que se constituyeron en los polos de desarrollo del movimiento gay en ese país.

(las mujeres tuvieron una historia distinta, ellas no fueron movilizadas, pero migraron a chicago, detroit y otras grandes ciudades para incorporarse a la industria de la guerra. allí se conocieron, intimaron, se independizaron. de hecho, los movimientos de lesbianas se asocian más a los movimientos feministas que a los de los gays hombres).
de nada sirvió la estrategia oficial que usó los medios de recuperar la familia ideal, fuertemente promovida usando la creciente y avasalladora influencia de la TV, esa imagen de la familia que vive en lindos suburbios, mamá hace las cosas de la casa con sus modernos electrodomésticos, papá trabaja y los niños son felices en la heladería del barrio.

Después, a fines de la década de 1940 surge una nueva forma de represión, directa y dura, encabezados por McCarthy, pero eso es otra historia

Bibliografía recomendada: The rise of a gay and lesbian movement
Barry D Adam 1987 G.K.Hall & co